El FOMO (Fear of Missing Out o miedo a perderse de algo en español) se entiende como un tipo de ansiedad social generalizada que se da por el miedo a que los otros estén teniendo experiencias gratificantes mientras uno no está. Se caracteriza por un deseo fuerte de estar continuamente conectado con lo que los otros están haciendo. Es un fenómeno muy ligado a las redes sociales.
¿Sabías que este fenómeno suele ser usado en marketing como parte de las estrategias? Usar la idea de que algo te estás perdiendo o te vas a perder suele ser una forma de persuasión bastante efectiva.
Es un tipo de marketing polémico, si se quiere, y es importante aprender a armarlo bien para que funcione. ¿Cómo podemos usarlo? El FOMO marketing se usa mucho en campañas de email marketing: usando asuntos que llamen la atención y que busquen generar una sensación de urgencia en el usuario. Por ejemplo, “50% OFF SÓLO POR HOY” o “Sólo por mañana: envíos gratis”.
Otra forma de usar este tipo de marketing es creando eventos exclusivos con entrada limitada. Puede ser un evento presencial en el que solamente ingrese poca gente (pueden ser clientes súper fidelizados a los que quieras recompensar por su lealtad) o, por ejemplo, crear una cuenta o grupo privado de Facebook en el que solamente ingresen clientes que hayan comprado X producto o servicio.
El FOMO marketing suele tener mejor recepción en un público millennial (el 69% de ellos siente “FOMO” y el 69% compra debido a esto). A su vez, gracias a este concepto psicológico, el 60% de las personas toma decisiones de compra en menos de 24 horas.
La implementación de una estrategia FOMO puede tener bastantes ventajas como el crecimiento de las ventas, fomenta las compras impulsivas y las ventas upsell/cross sell y son una gran herramienta para conocer el comportamiento de nuestros clientes en situaciones de presión. Es una buena forma de llamar la atención de nuestros clientes en un mercado altamente saturado de mensajes de miles de marcas.