Vender no es fácil. Eso, a esta altura, lo tenemos bien claro. Pero, que no sea fácil no quiere decir que sea imposible. Es cuestión de aprender y de estar organizado. Y para ayudarte con eso, te traemos el post que estabas necesitando.
Un plan de ventas es un documento que usan las empresas para trazar el camino para próximo ciclo de ventas. Es una especie de mapa que te va a ayudar a saber qué acciones vas a tener que llevar a cabo para lograr los objetivos que pusiste para tu negocio, qué obstáculos te podés encontrar y en qué contexto te encontrás.
Seguro ahora estás pensando…”Ok ¿cómo lo hago?” Bueno, en primer lugar lo que tenés que hacer es definir bien qué es lo que hace tu negocio (¿quiénes somos? ¿qué hacemos?) y quién es tu público objetivo (¿quién se va a beneficiar con tu producto o servicio?). Esto te sirve para saber en dónde estás parado y a quién querés llegar con lo que vendés.
Luego, pensá en qué herramientas vas a necesitar: cuáles son los recursos que tenes para cumplir tus objetivos y cuáles tenés que incorporar. Por ejemplo: ¿vas a vender online? Si ya tenés tus perfiles en redes sociales, esos son los recursos que ya están…pero si te falta una tienda online, eso sería un recurso a aquirir.
También, es necesario definir los objetivos de venta. Eso puede incluir desde atraer más leads, fidelizar los clientes que ya tenés o aumentar tus ventas con los clientes actuales. Detallalos lo más que puedas para poder planificar en función a ellos. Después de esto, es momento de armar un plan de acción que incluya las diferentes estrategias que se van a llevar a cabo en el ciclo de ventas.
Una vez que tenés todo esto en marcha, no te olvides de medir los resultados de las acciones que vas haciendo. Esto te va a ayudar a saber si vas bien o es necesario ajustar algo.
¿Por qué está bueno tener un plan de ventas? Porque nos sirve para tener una visión clara de a dónde queremos llegar con nuestros negocios y, sobre todo, cómo llegar.
