¿Cómo tratar a clientes tóxicos?

Ya sabemos que no todas las personas van a ser nuestros clientes. Pero, también, es necesario tener en claro que, aunque una persona reúna las características de nuestro “cliente ideal”, no siempre tenerlos cerca es lo mejor para nuestro negocio (y para nosotros). ⁣

Empecemos por los clientes que no valoran tu calidad. El precio va más allá del producto o servicio en sí. Incluye tus horas de capacitación, tus desveladas perfeccionando tu producto, tus tardes invertidas en encontrar el packaging perfecto. Si ese consumidor no tiene eso en cuenta y aún se queja del precio, decile chau. ⁣

Otros clientes que mejor tener lejos son los que no entienden (ni aceptan) tus tiempos. Hay muchas personas que no son conscientes de todos los procesos que hay detrás de un producto o servicio que esperan que todo se resuelva YA. Ya sea que esperan que respondas de madrugada, que les lleves su compra 5 minutos después de apretar el botón de “Finalizar compra” o que le parece que el tiempo que te lleva hacer lo que haces es muy largo, esos clientes atentan contra nuestra salud mental. Chau vol. 2.⁣

Hablemos ahora de los clientes tóxicos. Esos a los que nada les viene bien, que se enfocan solo en lo negativo, que critican todo lo que se les cruza, no tiene sentido trabajar en mantenerlos porque, a la larga, te hacen trabajar de más y te hacen perder tiempo tratando de calmarlos y terminás perdiendo plata. Esto incluye a los clientes autoritarios que no aceptan otro punto de vista y que creen que saben más que vos sobre tu negocio. ⁣

 

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